Las aves y el hombre – W.H. Hudson

Las aves y el hombre – W.H. Hudson

El mensaje de W.H. Hudson cobra fuerza, después de 100 años, con la primera traducción al español de su hermoso volumen «Las aves y el hombre».

El naturalista W.H. Hudson (1841, Quilmes, Argentina-1922, Kensington, Londres) es una de las voces pioneras de la narrativa sobre la Naturaleza. «Las aves y el hombre», una de sus obras más relevantes y que hasta ahora se encontraba inédita en español, puede considerarse como el modelo que sienta las bases de lo que posteriormente se llamará “divulgación científica”. La edición, traducida por Diego Alfaro Palma y Fernando Correa-Navarro, se basó en la publicación inglesa de 1920 que, ya en esa época, buscaba acercar al público común a las experiencias de Hudson. Su estrategia fue usar la literatura a su favor para acercar contenidos y observaciones en torno a las aves, con un fin didáctico y de conservación. El resultado fue una revolución de la ornitología: una nueva forma de observar el entorno natural.

Leer este hermoso libro, lleno de anécdotas, de recuerdos, apreciaciones que mezclan erudición y ternura, excur- siones donde nos topamos con diversos personajes que encarnan distintos tipos humanos, es una oportunidad para retomar una tarea pendiente, advertida ya hace más de 100 años por este inclasificable genio.

A mayor ruido…

Diego Alfaro, traductor de esta edición, considera que el mayor desafío es traer al español los giros exquisitos de Hudson: «Es un autor que para contarte del cucarachero pechiblanco necesita de párrafos biográficos, ágiles, en donde junta historias oídas en una granja o el estudio acabado de otro naturalista, para luego mostrarte las habilidades y características de esta ave, citar a un poeta reconocido, seguir caminando, compararlo con otra especie y, de pronto, de la nada sacar un fragmento pleno de belleza en donde uno se siente que lo va acompañando. Eso es difícil de hacer y es por eso que con Fernando Correa nos concentramos en conversar, revisar y discutir cada episodio, buscar y rebuscar los detalles de cada ave. Esto, junto con que Hudson es imposible traducir de un tirón, porque cada dos o tres páginas te detienes, completamente emocionado”.


Hudson les presta mucha atención a las flores (un símbolo típico en la poesía) ya las asociaciones humanas que sus coloraciones convocan. Recuerda una antigua leyenda que explica el origen del hombre, creado por muchos materiales. «Al final, se reunieron un montón de flores silvestres y se lanzaron al azar para darle color a los ojos”. «En Hudson uno encuentra el engarce perfecto entre la descripción y la memoria. Página a página, busca enlazar las relaciones del mundo natural, con lo que han dicho sobre ello los poetas. Eso hace que «Las aves y el hombre» no sea únicamente un libro de ornitología, sino una narración en torno a un ambiente, contada en primera per- sona, en donde se nos presentan comportamientos de aves que sólo se pueden lograr si uno está detenido por mucho tiempo observan- do. Y todo comportamiento, como el de las lechuzas, los cuervos y tantos otros de los que habla, son mostrados como una interconexión con los árboles y arbustos, la presencia humana u otros mamíferos, la geografía. Y en eso Hudson es un maestro que sigue los pasos de otros naturalistas como Humboldt o Darwin, o de exploradores como María Graham o Henry David Thoreau: ve en la Naturaleza una red de conexiones salvajes».

El tercer capítulo finaliza con una pregunta retórica: quién no ha sentido que «todos los sonidos naturales que se escuchan en un entorno natural son placenteros, incluso aquellos que sentimos como duros, y que no nos angustian, ni nos parecen discordantes, ¡ni electrifican nuestros nervios como los ruidos artificiales!”. «Ese es un tema recurrente en la literatura de fines del siglo XIX y principios del XX. Thoreau también lo menciona cuando hace refe- rencia a la llegada del ferrocarril. Hudson es híper consciente de que al describir un entorno debe hacer un relato pleno de colores, formas y sonidos. El oído es un órgano muy presente aquí, en cuanto que con él nos da una idea de la comunicación de una especie o del pai- saje sonoro que crean varias especies conviviendo en un mismo lugar. Y esto es algo que recién hoy la ingeniería en sonido está teniendo como preocupación o gente como Bernie Krauze (músico estadou- nidense y ecologista del paisaje sonoro, 1938), que ha estudiado el avance de la crisis climática y el deterioro de los ecosistemas a partir de la recopilación de muestras sonoras analizadas en periodos largos. A mayor ruido, menor riqueza de especies».

William Henry Hudson (1841-1922), conocido también como Guillermo Enrique Hudson, fue un naturalista y escritor que nació en Argen- tina, y que luego emigró a Inglaterra. Su trayectoria está marcada por su amor hacia las especies, en especial los pájaros. Allí surge su motivación para comenzar a escribir y publicar sus obras, convirtiéndose en uno de los escritores más icónicos de la lengua inglesa y ganándose el recono- cimiento de sus pares en ambos hemisferios, con obras como «La tierra purpúrea» (1885), «El Ombú» (1902) y «Mansiones verdes» (1904). El autor, sin embargo, no dejó de insistir en su filiación a la ornitología, pavimentando el terreno para un sinnúmero de escritores que habrían de dedicarse a la observación científica, la etología y lo que hoy se difunde bajo el género de «ecología». Con sus publicaciones convocó a lectores y autores tan notables como Jorge Luis Borges (1899-1986) -en su natal Argentina-, al gran Ford Madox Ford (1873-1939), quien aporta un texto a la presente edición (y frente al que Hudson se define no como uno de «esos escritores malditos», sino como «un naturalista de La Plata»), y al poeta británico Edward Thomas (1878-1917), el cual lo describe de este modo: «En Hudson la curiosidad es una pasión o, mejor dicho, forma parte de una pasión mayor que es el amor».

Artículo de Nicolás Poblete Pardo para Revista La Panera. Mayo 2023.

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

You may use these HTML tags and attributes:

<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>


Agencia Digital Bellaco, somos una Agencia Boutique